sábado, 20 de septiembre de 2014

Qué difícil es decir adiós...


Tuve la suerte de poder despedirme de ti, a solas y agarrándote la mano, pero he tardado un año exacto en poder dedicarte unas palabras.

El 20 de Septiembre de 2013 nos decías adiós dejando un enorme hueco en nuestras vidas, pero orgulloso espero de la maravillosa familia que formaste junto a esa hermosa mujer de ojos azules, preciosa sonrisa y cinturita de avispa, el amor de tu vida ( palabras textuales tuyas en uno de esos momentos de lucidez). Te fuiste rodeado de los tuyos, de los que tanto te amamos



Guardia civil de los antiguos, serio, recto y con un duro carácter que tuvo que lidiar con cinco mujercitas y más tarde con seis nietos a cada cual más gamberrete.





Una gran familia que creció unida, permanece unida y así seguirá, porque eso es lo que nos enseñasteis, a pesar de las riñas y enfados, de la distancia, la familia Tourón está por encima de todo y no sabemos vivir los unos sin los otros. Eso es obra vuestra, y por mi parte os estaré eternamente agradecida por ello.




Otra herencia tuya es el carácter, algunos más fuerte como el tuyo, otros menos como el de la abuela, Carmiña, pero todos con unos cojones (con perdón) para tirar con lo que se ponga por delante y para defender a los nuestros. El carácter Tourón es inconfundible.

Me gustaba llegar al camping y correr a darte un beso en la mejilla, justo al lado del bigote y ver esa sonrisilla que te asomaba, lo hacía de pequeña y de mayor no podía pasar sin ello. Sólo te molestaba si era después de comer y estabas con tu mando, cualquiera se atrevía a quitártelo, y viendo la película de vaqueros. Te recuerdo perfectamente sentado en el sofá dormido pero despierto, estabas a todo jaja...

Tuve el placer de trabajar contigo aunque te pusieras gruñoncete porque no apretaba el boli al escribir y no veías bien las fichas. No se te escapaba una y sabías si alguien se colaba, alguien intentaba robar, o había alguna tienda de más. Eras la perfecta mano derecha del jefe. Incansable y leal.

Sólo recuerdo haber discutido una vez de verdad contigo, en Lanzarote, no me acuerdo del motivo, pero sí de la discusión alrededor de la mesa en la habitación del hotel, ¿te acuerdas tu? Dos cabezones sin remedio y sin dar su brazo a torcer. En eso soy como tu

Siempre recordaré una conversación que tuvimos mamá, tu y yo paseando por Bayona agarradas a tu brazo. Nunca te gustó mi decisión de irme y estudiar esa carrera loca pero me respetabas y escuchabas mis historias. De tu hija más gamberra sólo podía salir una nieta loca como yo jajajajja

Siempre dijiste que antes de irte querías ver a tus dos nietos mayores casados y lo conseguiste, es más, llegaste a conocer a tus primeros bisnietos y hacernos muy felices a todos viéndote reír con Rodrigo, como si de dos niños pequeños se trataran




Quiero que sepas que no hay día en que no nos acordemos de ti, que algún pensamiento nos lleve a ti. Tus nietos te extrañan, tus hijas te siguen llorando y tu mujer, Carmiña, no eche de menos a su Manoliño y se emocione aunque intente disimularlo. Nos faltas abuelo cada vez que nos reunimos, en cada celebración, cada día. Tienes un pedacito de cada uno de nosotros ahí contigo.




A mi hiciste muy feliz cuando me viniste a ver al teatro, haciendo lo que más amo. Ya no veías y tenía miedo de que te agobiaras, pero una vez más nos sorprendiste, y sabías perfectamente cuando tu nieta estaba en el escenario, la sentías y la veías a tu manera

El día de hoy no lo podía pasar de otra forma y es subida de nuevo a un escenario. La actuación de esta noche te la dedico abuelo, porque sé que estarás viéndome en alguna parte con tu plato de aceitunas y tu caña, a lado de tus rosales. Te quiero mucho

Va por ti Brigada Tourón!!!

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